¿Puede la recuperación de las acciones de Nvidia ganar impulso antes de que finalice 2025?

La Actual Viento en Contra que Enfrenta al Gigante de los Chips

Hay una tensión palpable en el aire respecto al rendimiento reciente de Nvidia. El fabricante de chips de inteligencia artificial ha experimentado una caída notable, con su precio de acción retrocediendo aproximadamente un 17% desde los máximos históricos de octubre. El sentimiento del mercado parece cauteloso, y los inversores se preguntan si el líder en semiconductores podrá lograr una recuperación significativa en las últimas semanas del año de negociación.

Patrones Históricos de Diciembre: Lo que Revela la Data

El historial de Nvidia en diciembre cuenta una historia intrigante. Durante tres temporadas navideñas consecutivas, las acciones de la compañía han demostrado una resistencia notable. En 2023, las acciones subieron un 8.8% entre mediados y finales de diciembre. El año anterior, se registró una recuperación aún más impresionante del 10.1% durante la primera mitad de diciembre. Y en 2022, ocurrió un aumento del 13% en un período similar.

Sin embargo, hay claridad en el aire al examinar qué sería necesario para una verdadera recuperación. Para que Nvidia recupere su pico de octubre de $207.04, la acción tendría que subir aproximadamente un 17.4%, un movimiento sustancial que añadiría alrededor de $700 mil millones en capitalización de mercado. Aunque esto parece desalentador, existe un precedente histórico. Durante diciembre de 2016, cuando la capitalización de Nvidia era inferior a $64 mil millones, las acciones se dispararon un 33.9% entre el 1 y el 27 de diciembre, con casi la mitad de esa ganancia concentrada en los últimos 11 días.

El Factor Dependencia del Mercado

Surge un patrón importante al examinar los movimientos de Nvidia a fin de año: el rendimiento de sus acciones refleja la dinámica del mercado en general, aunque con una intensidad amplificada. Cuando el S&P 500 experimenta vientos a favor, Nvidia tiende a superar. Por el contrario, los vientos en contra del mercado golpean más duramente al fabricante de chips.

Las condiciones económicas actuales presentan un desafío. La trayectoria de crecimiento del S&P 500 se ha desacelerado notablemente. Tras un mínimo en abril, el índice general subió un 24.5% hasta mediados de año. Las ganancias del tercer trimestre se moderaron a un 7.8%, mientras que el rendimiento del cuarto trimestre hasta ahora es de solo un 1.9%, a pesar de tres recortes en las tasas de la Reserva Federal durante 2025. Sin expectativas de nuevos recortes antes de fin de año, las perspectivas de un rally sincronizado del mercado parecen disminuir.

¿Qué Podría Reavivar el Interés?

El ambiente en torno a los catalizadores a corto plazo de Nvidia sigue siendo tenue. La compañía ya entregó resultados excepcionales del tercer trimestre el 19 de noviembre, reportando ingresos récord de $57 mil millones, un ( aumento del 62% interanual, y ganancias por acción de $1.30, un ) aumento del 67%. La dirección destacó que las ventas del chip Blackwell están “fuera de serie”, con inventario de unidades de procesamiento gráfico prácticamente agotado. La orientación futura apunta a ( mil millones en ingresos del cuarto trimestre con márgenes brutos del 74.8% bajo estándares contables GAAP.

Generar otro salto en valoración de ) mil millones—equivalente a la capitalización combinada de Costco y Coca-Cola—requeriría anuncios extraordinarios. Desarrollos competitivos significativos por parte de las unidades de procesamiento tensor de Alphabet o los chips de gama alta de AMD podrían mover la aguja, pero tales disruptores parecen poco probables en el corto plazo.

La Perspectiva Realista

Aunque una recuperación dramática en diciembre hasta niveles récord no parece probable, esto no debería desalentar a los creyentes a largo plazo. Los fundamentos de Nvidia siguen siendo excepcionalmente sólidos, y la posición para 2026 parece favorable para el líder en semiconductores. Los inversores con convicción podrían ver cualquier debilidad de la temporada navideña como una oportunidad en lugar de un revés, una ocasión para iniciar o aumentar posiciones a precios más atractivos.

La claridad en el aire sugiere que la paciencia será recompensada. Para quienes buscan construir exposición a la infraestructura de inteligencia artificial, esperar una posible caída de fin de año podría ser una estrategia acertada.