Si tienes entre 30 y 40 años y llevas tres o cuatro años en el mundo de las criptomonedas sin lograr un cambio significativo, sin haber establecido un sistema de trading estable, y simplemente te dejas llevar por la suerte con contratos de alta palanca, ganando unos cientos de dólares hoy y perdiendo miles mañana, en un mercado de altibajos y volatilidad, haciendo apuestas arriesgadas, entonces tu carrera de trading está condenada a pasar por la angustia de volver a cero.

¿Crees que quedarte despierto toda la noche vigilando las gráficas cambiará algo?

Cuando te despiertes y abras tu cuenta, verás comisiones, tasas de financiamiento, deslizamientos, stops erróneos... Las ganancias de toda la semana casi se han esfumado, y el capital restante ni siquiera puede soportar una corrección decente.

Tu trabajo principal lo haces con la mente en otro lado, pensando en renunciar en cualquier momento, mientras tu familia piensa que eres un jugador que no se dedica a lo que debe, sin entender nada.

Ves a los compañeros del grupo mostrar gráficos con ganancias de $aster veces, comprarse un coche nuevo, y en este mercado alcista alcanzar la libertad financiera, y esa diferencia y ansiedad te invaden, como cuando recibes un mensaje de liquidación en medio de la noche.

Por más que te empeñes, que hagas análisis retrospectivos, solo ves cómo tu capital disminuye cada vez más, y la ansiedad y la presión se convierten en una montaña, como una posición en pérdida que nunca puedes resolver, apretándote cada vez más.