Otra vez una tendencia que no sigue las reglas habituales. El Banco de Japón anunció ayer un aumento de tasas hasta el 0.75%, alcanzando un nuevo máximo en 30 años. Por lógica, esta señal de contracción debería presionar a la baja los activos criptográficos, pero Bitcoin en cambio subió sin parar, incluso tocando cerca de 88,000 dólares. Esta contradicción es suficiente para confundir a muchos.

En realidad, esto es un ejemplo típico de la tendencia "bullish en exceso". La incertidumbre que había estado pesando en la mente finalmente se ha despejado, la incertidumbre se disipa, y con la ayuda de los datos del IPC de EE. UU. de anoche, la fuerza de compra reprimida ha encontrado una salida. A corto plazo, esto es una descarga emocional; pero a medio plazo, el aumento de tasas sigue siendo una contracción de la llave de agua, y esta especie de collarín terminará haciendo efecto. Es como una llamada de amor después de una ruptura: la emoción solo dura unos minutos, pero el dolor posterior no se puede evitar.

Veamos qué dice el análisis técnico. El gráfico en marco de una hora muestra que la tendencia bajista no se ha invertido fundamentalmente; en este momento, parece que alguien se sostiene con la mano en el suelo — en apariencia está intentando levantarse, pero su cuerpo todavía está débil. Hay algunos niveles psicológicos clave a vigilar:

La zona de resistencia está entre 88,000 y 89,990 dólares. Para superar los 89,990, necesita una fuerza de compra bastante fuerte. Mirando hacia abajo, los 85,000 dólares son la primera línea de defensa, y más abajo, los 83,800 dólares; si se rompe aquí, podría desencadenar pánico vendedor.

El indicador MACD ha cruzado al alza por debajo de la línea cero, lo cual generalmente es una señal de compra fuerte. Pero esto es como la emoción en tu primera visita al gimnasio: parece muy prometedor, pero lo importante es si puedes mantenerlo. En este momento, hay que observar el volumen de operaciones para hacer una evaluación. Si el precio sube pero el volumen no aumenta, hay que estar atento a si se trata de una falsa señal — puede que haya espacio para una caída posterior. En general, aunque la recuperación a corto plazo da algo de esperanza al mercado, la señal de que el fondo se ha estabilizado todavía no es lo suficientemente sólida; la prudencia sigue siendo la mejor estrategia.