Siempre hay algunos datos en el mercado que pueden engañar: en apariencia parece que hay una gran presión de posiciones cortas, pero la realidad puede ser totalmente opuesta.

El token HYPE ha protagonizado recientemente una escena así. Los datos on-chain muestran que esas cuentas con enormes posiciones cortas en realidad acumulan una gran cantidad de spot.

Por ejemplo, “BobbyBigSize” abrió un corto por valor de 51,5 millones de dólares en Hyperliquid, pero al mismo tiempo posee alrededor de 11,85 millones de dólares en HYPE al contado. Más llamativo aún es “Abraxas Capital”: mantiene una posición corta de 71 millones de dólares, mientras que su posición en spot es de 63 millones, dos cifras casi iguales. Además, este mes sigue aumentando su posición spot.

¿Qué sentido tiene esto? La respuesta es la clásica estrategia de cobertura (hedging).

Si realmente fueras bajista con un token, ¿abrirías cortos mientras acumulas frenéticamente spot? Evidentemente, no. La lógica de estas ballenas es: usar cortos para cubrir el riesgo de caída, y aprovechar la subida con el spot. Cuando el mercado se mueve lateralmente, ganan por ambos lados; incluso si el precio se desploma, las pérdidas en spot quedan cubiertas por las ganancias de los cortos. El riesgo es controlable y permite operar en rangos.

Para el inversor común, hay varios puntos a tener en cuenta:

Primero, no te dejes asustar por los datos de posiciones cortas. Esas enormes posiciones bajistas no son necesariamente una señal de dumping, es muy posible que los grandes inversores solo estén equilibrando su riesgo. El comportamiento de Abraxas, que sigue acumulando spot, es mucho más revelador: no tienen intención de salir.

Segundo, que las ballenas tengan simultáneamente posiciones en spot y derivados significa que pueden provocar movimientos bruscos en puntos clave, para liquidar a los usuarios con alto apalancamiento. Si justo entraste en esos niveles con un apalancamiento elevado, es fácil que te lleven por delante.

Por último, recuerda: la verdadera señal de alarma es cuando las ballenas empiezan a reducir spot de forma sincronizada. En ese momento, las posiciones cortas dejan de ser una mera cobertura y se convierten en una apuesta bajista real.

Los datos hablan, pero hay que saber interpretarlos.