Aave ha aprobado recientemente una importante propuesta de gobernanza para realizar una gran limpieza en el despliegue multichain de su versión V3.

Hay dos acciones clave: la primera es aumentar el Reserve Factor (en pocas palabras, que el protocolo cobre más comisiones) en cadenas con un rendimiento mediocre como Polygon, Gnosis, BNB Chain y Optimism, dándoles un periodo de observación de 12 meses. Si tras ese tiempo los ingresos siguen siendo bajos, se plantearán retirarlas. La segunda acción es eliminar directamente los despliegues en zkSync, Metis y Soneium.

Lo más contundente es que han fijado una regla estricta: ¿quieres que Aave se despliegue en una nueva cadena? Debe generar al menos 2 millones de dólares de ingresos al año, si no, ni lo intentes.

Esto refleja una tendencia: los protocolos DeFi están pasando de “desplegar en cualquier sitio” a “solo donde haya beneficios reales”. Al fin y al cabo, mantener tantas cadenas cuesta dinero y los recursos deben dirigirse a donde realmente aporten valor. Para aquellas blockchains con poca liquidez, la presión es considerable.