⚠️ El Departamento del Tesoro de EE. UU. ya ha entrado en una zona de secuestro por tipos de interés—

El gasto en intereses ya representa aproximadamente el 14% del gasto federal, pero actualmente el rendimiento de los bonos del Tesoro es solo del 3,7%.

¿Y si volvemos al 6% de los años 90? Las finanzas probablemente colapsarían directamente.

Esto es lo que se conoce como Fiscal Dominance (dominancia fiscal): la política monetaria deja de ser libre y tiene que girar en torno a la sostenibilidad fiscal.

El próximo presidente, Hassett, es partidario de bajar los tipos rápidamente, y la gente de Wall Street que opera en el mercado de deuda está al borde de un ataque de nervios.

Porque, según la lógica del mercado de deuda, una bajada rápida de tipos solo tiene un significado: las finanzas no aguantan más y la Reserva Federal está lista para rendirse.

Una vez que se forma esta expectativa, los tipos de interés a largo plazo subirán, ya que todos exigirán mayores rendimientos para compensar la posible inflación futura, la expansión monetaria y la incertidumbre política.

Quizá veamos un escenario especialmente surrealista:

Los tipos a corto plazo bajan,
los tipos a largo plazo suben arrastrados por el mercado,
y la presión fiscal no solo no se alivia, sino que se agrava.

¡Es muy probable que nos enfrentemos a un mercado desordenado durante varios años!