Recientemente he visto una jugada bastante salvaje: fusionar una plataforma de lanzamiento de Memecoins con un DEX de contratos perpetuos directamente.

La idea es la siguiente: cierto ecosistema podría integrar la funcionalidad de una plataforma de lanzamiento y sacar una operación tipo “apenas sale, ya puedes abrir cortos”. Suena disparatado, pero pensándolo bien, realmente ataca dos problemas clásicos bastante difíciles.

Primero, la liquidez. Muchas memecoins nuevas, tras su lanzamiento, tienen un mercado secundario tan fino como el papel, y las fluctuaciones de precio dependen únicamente del ánimo de la comunidad. Luego está la gestión de riesgos: los que consiguen tokens en etapas tempranas solo pueden quedarse mirando y esperar a que suba el precio, sin ninguna herramienta de cobertura; si ganan, bien, si pierden, a aguantarse, todo queda al azar.

Si realmente se pudiera habilitar el mercado de contratos perpetuos en el mismo instante en que se emite el token, los creadores de mercado y especuladores podrían entrar directamente a abrir posiciones, y al menos la liquidez no se cortaría de golpe. En cuanto a los inversores iniciales, por fin tendrían una herramienta para asegurar sus posiciones. Eso sí, habrá que ver si técnicamente es viable y qué opina la regulación. Pero desde luego, esta idea abre una nueva vía para la financiarización de los Memecoins.